domingo, 25 de enero de 2009

¿En qué animal te gustaría reencarnarte? ¿Por qué?


Hemos escrito en clase un texto para decir qué animal nos gustaría para reencarnarnos en otra vida y éstas han sido las respuestas. A ver cuál os convence más.


Víctor Martín López: REENCARNACIÓN

Si me dieran la opción de reencarnarme habría mil uno que me gustaría ser. No obstante de entre todos ellos y con mucho pesar de solo poder ser uno, elegiría el león. Esto es así por las razones que doy a continuación:
El león es conocido como “el rey de la selva” y ese apodo llama mi atención. Posee un buen físico y bastante equilibrado en relación con otros animales que, gozando de ciertas virtudes, carecen de otras. Una vez en su trono este gran felino lleva una vida feliz, plena y apacible en todos los sentidos. De vez en cuando, debe afrontar algún reto o contratiempo para defender a su clan o mantener su status social que le aporta ese toque aventurero que toda existencia necesita. Es también bello, como el león protege a su prole y solo mata cuando es necesario. Su figura y ser son nobles y han sido escogidos en muchas ocasiones para expresar fuerza, honor, grandeza, sabiduría, fiereza en emblemas y blasones familiares. Por esto y por infinidad de razones querría convertirme (reencarnarme) en un león con el pelaje dorado y una gran melena rojiza.


ÁLVARO GALLEGO PORRAS:
La reencarnación es una creencia que consiste en la vida después de la muerte, pero en otro cuerpo y tiempo. Los chinos, por ejemplo, creen que la resurrección el alma del muerto perdura en otra forma de vida, pero no se acuerda de nada.

Si pudiese reencarnarme en un animal, cuando me muera, lo haría en una ballena azul. Me encantaría visitar todos los rincones del mar, incluidas las profundidades oceánicas. Sólo conocemos el diez por ciento del océano. Siendo una ballena, a juzgar por mi tamaño no tendría problemas con ningún otro depredador, excepto el ser humano.

Las cuatro cosas que más me fascinan son: la civilización egipcia, el futuro, el universo y las profundidades mencionadas anteriormente.

Tengo un documental de “Planeta Azul” en el que explican un sinfín de descubrimientos durante un viaje a tres mil metros bajo el agua (equivalente más o menos a cien atmósferas de presión). Este viaje se realizó hará ya ocho o diez años, con instrumentos y maquinaria especializados y científicos con experiencia. Con este estudio dieron a conocer infinidad de especies de moluscos, crustáceos y peces. Incluso se vio un cadáver de ballena gris que había descendido hasta los dos mil y pico metros, y estaba siendo aprovechado por otras criaturas abisales, comiéndoselo claro.

Aunque ninguno se vio en este documental, años atrás se dio un caso en el que un calamar gigante (el término mitológico es Krackent) de quince metros fue hallado por unos pescadores en la superficie del mar; ya había muerto.

En resumen, por lo que quiero reencarnarme en una ballena azul es para hartarme de comer boquerones durante mucho…tiempo…

3 comentarios:

marcos dijo...

La limpieza de pájaros

Estoy identificado con el relato leído, una versión moderna de El Conde Lucanor, porque una tarde calurosa mi padre estaba limpiando la jaula de nuestros tres pájaros y se le olvidó sacar a los pájaros de la misma jaula, una vez que él estaba limpiando. Mi hermano no tardó en recriminárselo, porque según él, había que sacar a los pájaros de la jaula para poder limpiar la jaula mejor. Mi padre le hizo caso, y al poco tiempo los sacó y los colocó en una caja de zapatos, a los tres pájaros juntos, ya que no son una espacie muy grande y voluminosa.
Mi madre al llegar al lugar de la limpieza de la jaula, le juzgó negativamente, porque a su modo de ver los pájaros se podían asfixiar. Mi padre, algo molesto ya, le dijo que había hecho unos agujeros grandes para dejar a los pajaritos respirar.
Mi padre siguió limpiando la jaula de mis queridos pájaros con esmero y dedicación.
No tardé mucho en percatarme de que los pájaros se podían escapar y, muy rápido por mi temor a la escapada de los pajarillos, se lo hice saber a mi padre. Mi padre me dio a entender que estos animalillos con la oscuridad profunda se duermen al igual que todos los animales, pero yo, algo inquieto por la huida, le obligué a cambiar de lugar a nuestras aves.
Mi padre los cambió de lugar de nuevo, los cambió a otra jaula que tenemos guardada y olvidada en una estantería, ya algo vieja y oxidada.
Mi madre al ver la operación del cambio de jaula de los pájaros, exclamó que después de ese cambio los dichosos pájaros iban a ensuciar la otra jaula y, entonces, tendría que limpiar no una jaula sino dos. Mi padre, cansado y aburrido de tantas quejas, decidió dar por finalizada la limpieza de los pájaros. La jaula nueva, seguía estando sucia, y los pájaros dentro de ella terminaron el día.
A la conclusión que llegó mi padre y que después me comunicó, fue la siguiente:

Limpia los pájaros cuando estés tú sólo y si no puede ser, limpia sin hacer caso a las recomendaciones que escuches. Siempre busca tu propio provecho y no te dejes llevar por nadie.

Marcos Ramiro Montero 3ºA
12/12/2008
Lengua castellana y Literatura

Miguel Lara dijo...

Si me diesen a elegir en qué animal reeencarnarme, sin duda elegiría en un leopardo.
El leopardo es un animal con una gran potencia física, además de ser bonito y sobretodo muy veloz.

No pasaría hambre puesto que el leopardo es un temido depredador, ya que es carnívoro y con lo veloz y sigiloso que es no hay pieza que se le resista.

Miguel Lara López

Alejandro López Pajares dijo...

EN QUÉ ANIMAL TE REENCARNARÍAS


Si tuviera la oportunidad de reencarnarme en un animal elegiría al gato.
Creo que mi personalidad y la suya son bastante similares.
Soy bastante dormilón, me gusta descansar y no soy un gran amante del trabajo, aunque cuando sé que hay que hacer algo lo hago hasta que lo consigo.
Otra de las razones es que me encantan los gatos. Su apariencia, sus ojos y su carácter ya que parecen agradables, tranquilos y cariñosos, pero si les molestas mucho pueden clavarte las uñas.
También me gusta la relación de los gatos con el miedo y el terror.
Me parece un animal interesante y del que podemos sacar múltiples lecturas e ideas, ya que no sol hace el vago, come y duerme.
Este último punto también creo que se asemeja a mi personalidad, y por ello he elegido a este peculiar pero a la vez común animal.

Alejandro López Pajares.